Peinados


Técnicas de peinados:
En el cabello rizado la clave está en definir los rizos para realzar toda su belleza.
Para potenciar la ondulación o el rizo natural, aplica en tu cabello lavado y bien nutrido una espuma de moldeado con la fuerza y cantidad apropiada a su textura para no apelmazar (mejor si la extiendes con el peine), seguidamente secas el cabello con el difusor a una intensidad baja y ayudándote de tus manos en con un gesto de ir apretando el cabello hasta casi su total secado. De este modo, el cabello gana volumen y un mayor movimiento, reavivando la fuerza de tus rizos.
Si tu cabello no es rizado, pero quieres conseguir un peinado de rizos, utiliza los rulos o bodys con el grueso en proporción al rizo que quieras conseguir junto con una espuma de alta fijación que moldea el cabello sin castigarlo. Recuerda que si tu cabello es fino siempre necesitarás marcarlo con unos rulos más pequeños que si fuera un cabello más grueso. Para un acabado perfecto, basta con retirar los rulos cuando el cabello está totalmente seco y, sobre todo, peinarlo con los dedos, no con cepillos ni peines y conseguirás un marcado de rizos espectacular.

Conseguir lucir un cabello liso.
Ya puedes lucir una melena totalmente lisa. Actualmente, los profesionales disponen de técnicas y productos que no perjudican el cabello, como cremas de desrizado con diferentes graduaciones que proporcionan una buena caída al cabello y lo dejan sedoso y sin encrespamiento, siempre que posteriormente al alisado, independientemente de la técnica utilizada, la persona cuide su cabello con los productos específicos para la nueva textura lisa del cabello.
Para potenciar el alisado, los expertos recomiendan trabajar con la plancha, aplicando antes un protector de cabello para evitar que éste se reseque
Otra opción para conseguir un cabello extraliso, debes de secar el cabello con un cepillo redondo grueso o un cepillo plano de cerdas naturales, y terminar con un chorro de aire frío para marcar el peinado
Cuando el cabello esté prácticamente seco en las capas inferiores y en las raíces, recomiendan envolver en el cepillo la capa superior del cabello y proyectar el secador de mano, de modo que el aire se mueva de arriba a abajo, hasta que todo el cabello
esté seco. Basta con repetir la misma operación en todas las capas del cabello, procurando que el aire no sea demasiado caliente, ya que castiga el cabello y le quita brillo.